De acuerdo al Centro Nacional de Mitigación de Sequías de Estados Unidos: La sequía, junto con el año más caluroso de la historia norteamericana, amenaza al productor de cultivos grícolas más importante del mundo.Cerca de 40 millones de acres de maíz se están marchitando en la sequía más severa en más de medio siglo.
Casi 9 de cada 10 hectáreas de maíz están bajo sequía. En el transcurso de la semana pasada, el tamaño de la región más gravemente afectada por la sequía aumentó en más de 30 millones de acres.El Departamento de Agricultura de EE.UU. la semana pasada añadió 218 condados a su lista de zonas de desastre, que comprende actualmente 1.584 condados en 32 estados.
Drought Destroys Corn Crop/Drying up Mississippi River and creates a Global Ripple Effect Worldwide
Esta vez le tocó a los peces sufrir las inclemencias del clima: se calcula que 40.000 ejemplares de esturión nariz de pala perecieron a causa del descenso en el nivel de los ríos y de las altas temperaturas del agua.Miles de peces han muerto en el centro-este del país debido a que el clima cálido y seco ha causado un descenso en el nivel de los ríos y que las temperaturas del agua alcancen casi 40 grados Celsius.
Unos 40.000 ejemplares del esturión nariz de pala murieron en Iowa la semana pasada debido a que la temperatura alcanzó los 36 grados centígrados. Funcionarios de pesca de Nebraska dijeron que han visto miles de esturiones, carpas, bagres y otras especies de peces muertos en el río Lower Platte, incluido el esturión pálido, el cual se encuentra en peligro de extinción.
Por su parte, biólogos de Illinois dijeron que el clima caliente ha matado a miles de percas y bagres.
La cantidad de peces muertos en un lago de Illinois ha sido tal que los cadáveres taparon el filtro de una toma de una hidroeléctrica, lo que redujo el caudal a tal nivel que la planta tuvo que apagar uno de sus generadores.
Las siete plagas de la destrucción parecen haberse desatado sobre el planeta y la humanidad. Y las interpretaciones sobre el origen de las catástrofes seriales que devastan la tierra giran desde lo científico a extrañas teorías (silenciadas oficialmente) que atribuyen esos fenómenos a experimentaciones militares orientadas al control de países y de poblaciones.
Una serie inusitada de fenómenos climatológicos extraordinarios se registró en el planeta durante las últimas semanas.
Es como si hubiera estallado un aviso de Apocalipsis: Terremotos, lluvias de una intensidad inusitada en todo el hemisferio sur, nevadas históricas en el este norteamericano y el norte europeo, sequías devastadoras en las mismas regiones donde no hace mucho las inundaciones arrasaban a poblaciones enteras. Aludes, incendios forestales, crecidas de ríos y océanos, deshielos monumentales, hambrunas masivas.
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